El sonido del bandoneón es el del tango. Pero también es parte esencial del folklore del NOA, donde la formación criolla de guitarra, bombo y bandoneón sigue alegrando los patios y los bailes públicos en los pueblos.
A Santiago Arias, que nació en San Salvador de Jujuy y se crió en Tilcara, lo cautivó el bandoneón. En Buenos Aires estudió en el Conservatorio Manuel de Falla y tomó clases con Dino Saluzzi, César Franov y Juan Carlos Mono Fontana.
Hoy a las 21 Arias viene a presentar su segunda producción solista, “Evocación de Carnaval”, en el auditorio del Centro Cultural Virla (25 de Mayo 265). El músico ha editado varios discos junto a colegas y ha girado su música por Europa y Asia.
- ¿Cómo llegás a enamorarte del bandoneón en la Quebrada de Humahuaca?
- Aprendí a tocar el bandoneón gracias a una familia amiga, los Silva, quienes me dieron en préstamo el instrumento que había sido del padre, don Benito Silva, y con él empecé a meterme cada vez más en la técnica. Yo ya estudiaba música -guitarra y bajo- y el bandoneón me generó una gran intriga siempre. Tenerlo cerca me planteó el desafío de entenderlo y de hacer música con él.
-¿Cómo surge y qué ha inspirado tu disco “Evocación de Carnaval”?
- Este disco es el resultado de tres años de ausencia de esta celebración entrañable por la pandemia. Toda mi vida pasé el carnaval en Tilcara. Estar en el exterior de 2018 a 2020 me generó la necesidad de evocarlo, recordando y haciendo música desde ese sentir interno. Me inspira la referencia de los paisajes, de los momentos, de los recuerdos e imágenes...
- ¿Cuándo y dónde se grabó?
- El disco fue grabado en dos etapas: la primera en la residencia artística Musibéria, en Serpa (Portugal) en 2019, y la segunda en el estudio ION de Buenos Aires, en 2020. “Evocación de Carnaval” se editó en formato físico, con un libro de ocho páginas, con fotografías de los jujeños Inti Patiño y Hernán Paganini y coplas mías. Además está disponible en todas las plataformas digitales.
- ¿Cómo es el contenido?
- El repertorio incluye temas tradicionales norteño-andinos: una selección de cuecas bolivianas ”Elenita/Urpi”, una “Selección de caporales” y una selección de huaynos de Bonny Alberto Terán. Hay obras del Cuchi Leguizamón: “De solo estar”, “Chacarera del zorro” y “Zamba del mar”, en versiones solistas de bandoneón. El disco tiene dos improvisaciones libres en torno de ideas folclóricas, “Diálogo con el abuelo” y “Mala macha”. Por último “Danny boy / Por el cerro Negro” combina músicas folclóricas de Irlanda y de la Quebrada de Humahuaca.
- ¿Qué vas a ofrecer esta noche en el Virla?
- Presentaré el disco, que es de bandoneón solo y voz. También voy a tocar algunos temas que no están en esta producción, y voy a compartir la música con Martín Páez de la Torre como invitado. Vamos a hacer folclore criollo en guitarra y bandoneón.